Parroquia Espíritu Santo
SVD Mendoza
Memorias de la Parroquia del Espíritu Santo
NACE LA PARROQUIA DEL ESPIRITU SANTO
A partir del final de la década del 50´, la zona que hoy atiende la Parroquias del Espíritu Santo al noroeste del Dpto. de Godoy Cruz-Mendoza, sufre una transformación en su estructura urbana, naciendo los nuevos barrios “Gas del estado”, “San Ignacio, “SUPE 2", Empleados de Comercio”, “Grafico”, “Jardín Serrano”, “Vandor” y “Judicial”, lo que supuso un gran incremento de la población. Los habitantes de los primeros barrios, durante más de dos años, tenían que trasladarse a la Iglesia de Ntra. Sra. Del Carmen (Obra de Don Orione), a la entonces Vicaria del Virgen del Valle, o a Ntra. Sra. De Pompeya, para recibir el necesario apoyo espiritual.
De la última nombrada, se dependía jurisdiccionalmente, por lo que en 1962, los Padres Franciscanos realizaron una misión apostólica, que hizo prender en la comunidad el deseo de contar con un lugar para celebraciones, lo que se concreto primeramente en un garaje cedido por una familia, contando con el aporte del Padre Tarcisio, religioso Josefino de Guaymallén, que presto su colaboración, con el apoyo de las Hermanas Claretianas.
Construida la Escuela Primaria “Severo Gutiérrez de Castillo” (donada por la empresa Plazza y Plana, como parte del contrato de construcción del Barrio San Ignacio, se consiguió que los actos litúrgicos se realizaran en esa dependencia, colaborando además del Padre Tarcisio, el Padre Barrera y otros sacerdotes de la Diócesis. Paralelamente fue creciendo el trabajo del Apostolado laical, recorriendo los barrios y realizando reuniones en casas particulares.
Los Misioneros del Verbo Divino
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P. Miguel Kein, SVD- Párroco
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P. Mario Olea, SVD- Vicario parroquial
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P. Benny Bnani, SVD - Vicario parroquial
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Diacono Horacio Orquin, Asistente parroquial
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Diacono Daniel Ferri, Asistente parroquial
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La Sociedad del Verbo Divino fue fundada por San Arnoldo Janssen el 8 de septiembre de 1875 en Steyl, un pequeño pueblo de Holanda, a poca distancia de la frontera alemana.
“El amor y la gracia de Dios nos han reunido de diversas naciones y continentes en una Congregación religiosa y misionera, consagrada al Verbo Divino y distinguida con su nombre”. (Prólogo de las Constituciones SVD)
El objetivo último de nuestra misión es hoy el mismo que ha sido desde los tiempos de nuestro fundador: “proclamar el Reinado del Amor de Dios” como destino común de toda la humanidad y como horizonte hacia el cual peregrinamos. La misión nace del amoroso diálogo interno del Dios Uno y Trino, un diálogo de amor y reconciliación con toda la humanidad. Somos llamados por el Padre, enviados por el Verbo y guiados por el Espíritu.
Como lo hacemos
La razón de ser misionero es servir a la paz, promover la vida y la reconciliación de los hombres con Dios y entre sí. Nuestra vida de oración y trabajo se extiende desde la proclamación de la fe hasta el desarrollo integral del hombre, construyendo la Iglesia hasta en países no cristianos. Somos seguidores de Jesús, como religiosos misioneros del Verbo Divino, de diversos países y culturas, edades y mentalidades. Evangelizadores, viviendo de la Palabra y la Eucaristía, en comunidades fraternas a imagen de la Trinidad.
Presencia de los Misioneros del Verbo Divino en el mundo
Estamos en la vanguardia misionera de la Iglesia, trabajamos preferentemente en lugares donde todavía no se conoce el Evangelio o entre las comunidades más necesitadas. Promovemos la dignidad de las personas, los derechos humanos y la defensa del medio ambiente. Hoy, los que conformamos la Familia del Padre Arnoldo Janssen (SVD, SSpS y SSpSAP) estamos dispersos por todo el mundo con el único y común ideal que nos ha reunido de diversas naciones y continentes: proclamar la Palabra de Dios a todos los hombres, preferentemente allí donde el Evangelio aún no ha sido anunciado.
La Congregación del Verbo Divino cuenta hoy con más de 6.500 miembros entre sacerdotes, Hermanos y estudiantes en formación. Sus misioneros trabajan en 72 países del mundo.